Lunes. De los malditos.
Soborno a la acera para que vaya más deprisa.
Algunos árboles me guiñan las hojas.
Tiritan mis pasos asustados.
Café, mejor dos, por favor;
le pido a la camarera de los ojos de mar.
(Vamos, vamos, dile lo del beso, insiste mi taza por lo bajito).
De pronto, amanece.
2 days ago